En mi familia paterna el amor se expresa con la comida: Cuando celebramos algo, cuando despedimos a alguien, siempre acompañamos todo con comida. Una atolada, una reunión para tomar sopa de "pata", comer elotes locos o disfrutar de una cena: Esos son las formas en que mi familia socializa.
En casa de mis tías siempre habrá segunda ración y te sirven todo calientito y en plato enorme. Para ellas amar es alimentar, es nutrir, es ofrecerte un delicioso budín hecho en casa, con los mejores ingredientes, es decirte (cuando ya terminaste de comer) "¿No querés más?".
Amo esa forma de amar. Talvez no sea tan sana (casi todos mis parientes sufren de la presión arterial, del colesterol, etc.), pero es genuina, es entregada, abnegada.
Alimentar a otros es amarlos. Definitivamente, tengo que aprender a cocinar.
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