sábado, 20 de noviembre de 2010

"Mi vecino Totoro"...una película que tienes que ver

Mi primera incursión en las películas japonesa fue con la mundialmente célebre “El viaje de Chihiro” una película estéticamente impresionante, detallada y puntillista, con música realmente inspiradora y con un argumento para grandes y chicos, que a todos los que vimos la película nos mantuvo expectantes, esperando conocer lo que pasaría en los próximos dos, tres, cinco minutos y sorprendiéndonos con cada paso en el desarrollo de un argumento que nos sumergía en una historia con posibilidades, recovecos y situaciones que jamás hubiéramos imaginado.

Desde entonces, no volví a ver ninguna película inspirada en las leyendas japonesas de dioses y espíritus que habitan los bosques y me quedé con “El viaje de Chihiro” como único referente sobre la animación japonesa.


Pues bien, hace pocos días vi mi segunda película japonesa. La elegida fue “Mi vecino Totoro”, un clásico de la animación japonesa dirigida por Hayao Miyazaki en 1988 y realizada por los Estudios Ghibli.




La trama se sitúa en la década de los cincuenta y gira en torno a la historia de dos niñas que junto con su padre (un profesor universitario que trabaja en el Departamento de Arqueología y Antropología) se mudan a una casa cerca de un bosque mientras la madre de las niñas permanece en un sanatorio, aquejada de tuberculosis.




Casa en que viven los protagonistas de la historia



Las niñas son Mei y Satsuki Kusakabe. Mei tiene cuatro años de edad, es la hermana menor, se caracteriza por su alegría extrema y sin inhibiciones, es extremadamente curiosa y no tiene miedo a nada. Su nombre es la transcripción fonética de May (“Mayo” en inglés). Por otro lado, Satsuki es la hermana mayor, tiene once años, es madura para su edad, se encarga del cuido de su hermana, tiene el cabello corto y va a la escuela rural. El nombre de este personaje, por su parte, también encierra un dato curioso ya que “Satsuki” era el nombre que recibía antiguamente en Japón el quinto mes del año.


Las niñas, al entrar en contacto con la casa en la que vivirán se dan cuenta que en ella y sus alrededores, habitan fantasmas y espíritus que sólo pueden ser vistos por los niños. Por ejemplo, en la casa viven lo que ellas llaman “conejillos del polvo” que son los espíritus que habitan en los lugares viejos, en donde el polvo y las telarañas tienen su guarida.


Sin embargo, el mayor descubrimiento se encuentra fuera de la casa, en el viejo tronco de un árbol escondido entre un espeso follaje. Es en ese tronco donde vive Totoro, el espíritu del bosque que posee un abultado vientre, sonríe de oreja a oreja siempre que es posible y suele transportarse en el “Gatobús”, un gato enorme que es un autobús que en lugar de ruedas tiene patas a los lados.








Elegida por la revista británica Time Out, como la mejor película de animación de la historia, "Mi vecino Totoro" es una excelente opción por una deliciosa tarde de fin de semana.

1 comentario:

Alma dijo...

Vi hace tiempo "El viaje de Chihiro", sencillamente maravillosa, y la que hoy usted presenta acá no la conocía, asi que, la pongo desde ya en mi listado por ver...

Saludos Ruth