domingo, 31 de enero de 2016

Loulou de la Falais

Basta con embeberse en la vida de otros, en las tradiciones de otros lugares, en los colores que abundan por otras tierras para obtener suficiente inspiración para autodefinirnos, para construir la manera en que nos percibimos y queremos ser percibidos. Precisamente, me parece que Loulou de Falais fue una persona que se sometió a ese proceso creativo que resultó en sus vestuarios teatrales, casi de fantasía, en su gusto por la estética ética y en su buen gusto por los accesorios que acaparan la atención y que son capaces de lograr que una  una camiseta blanca no sea "una simple camiseta blanca". Rica, bohemia, elegante y con amigos influyentes, Loulou de la Falais tuvo el orgullo de trabajar para Yves Saint Laurent, precisamente, accesorizando sus atuendos.

A mí, que me gustan tantos los accesorios, veo estas fotos y no puedo dejar de pensar que Loulou de la Falais es una de esas mujeres que, como Iris Apfel, nos recuerda que vestirnos debe empezar por vestirnos para nosotras mismas y por vestirnos para sentirnos cómodas. Vestirnos para ser nosotras mismas. Y, cuando eso sucede, la belleza aflora. Porque la belleza es, sin duda, estar cómodos con nosotros mismos: